sábado, 31 de diciembre de 2016

El antiguo palio y la jarra de plata de Arjonilla. Jaén 1904, Sevilla 1929

Palio de Arjonilla en en pabellón de Jaén de
la Exposición iberoamericana de Sevilla. 1929
A comienzos del pasado siglo, dos muestras artísticas provinciales hicieron “poner en valor”, como se dice en nuestros días, dos elementos singulares del patrimonio artístico de la Parroquia de la Encarnación de Arjonilla: El palio y una jarra manierista de plata. 

Decía un sobrino del Prior D. Francisco Morales Vera, de nombre Marciano, a quien su tío acogía en la casa rectoral para darle estudios a finales de la década de los años veinte, que el palio de Arjonilla era un tapiz persa, reconvertido en este objeto para el uso litúrgico. Otros informantes cercanos a la Parroquia, nos transmitieron oralmente que el mismo palio, cuya presencia en la Exposición iberoamericana de Sevilla en 1929 está bien documentada, también había sido llevado a Jaén con ocasión de una visita real. 

Efectivamente, los documentos terminan por ordenar lo transmitido oralmente, y en el Boletín oficial de la Diócesis de Jaén, en el año 1904, y con ocasión de la visita que Alfonso XIII realiza a la capital de nuestra provincia, recoge lo siguiente en las páginas 167-171: 

SU MAJESTAD EL REY EN JAÉN

El día 15, según estaba anunciado, llegó a esta Capital S.M. el Rey D. Alfonso XIII. Para dispensarle un digno recibimiento se reunían en la Estación a las cuatro de la tarde todas las Comisiones oficiales... A las cuatro y media llegó el tren real, conduciendo al augusto viajero y su comitiva, y a las cinco entraba en la Ciudad en medio de un gentío inmenso, yendo a nuestra hermosa Basilica Catedral en cuya puerta principal le recibió bajo palio nuestro Excmo. y Rvdmo. Prelado... Terminado éste y después de adorar el Santo Rostro, que impresionó vivamente al Monarca, invitado éste por el Prelado, pasó con su comitiva a la Sacristía, en donde convenientemente distribuidas en mesas, se habían preparado algunas de las alhajas y preciosidades, que guardan las Iglesias de nuestra Diócesis, y cuya lista copiamos a continuación...

jueves, 29 de diciembre de 2016

HIDALGUÍAS DE ARJONILLA. La obra de Mariano Sáez

Escudos nobiliarios en los basamentos de las farolas
de la Plaza de la Encarnación. 
Ildefonso Rueda Jándula

“En la villa de Arjonilla vive un hidalgo mozo y alegre, rico y gustador, amigo de sus gustos y libertad, poco temeroso de Dios y gran burlador de mujeres...” Así comienza Pedro de Madrazo su balada en prosa titulada “El Hidalgo de Arjonilla” publicada en el Semanario Pintoresco Español, cien años después de la relación de hidalgos que compartimos a continuación, extraída de la publicación “Hidalguías de Jaén”.

Ya en la obra de Mariano Sáez, se nos advierte que a la fecha de la recopilación de los datos para la “Única Contribución”, que supuso el Catastro del Marqués de la Ensenada el estamento nobiliario español atravesaba una etapa en franca decadencia. En el caso de Arjonilla, los hijosdalgo que refiere el extracto de Mariano Sáez reflejan esta decadencia, de unos apellidos en los que pervive la nobleza vieja jienense, algunos de los cuales pueden rastrearse en el tiempo hasta la misma reconquista. 

Sin entrar en mucho análisis, a primera vista se puede observar, en comparación con otras villas y ciudades de la Provincia el alto número de hijosdalgo avecindados, con solar en calles principales y secundarias del entramado urbano, y el alto número de solteros hijosdalgo. Sirva la lectura del texto para adentrarnos en todo un capítulo no investigado, de la Historia de Arjonilla, como son las genealogías nobiliarias.

martes, 27 de diciembre de 2016

Campanilleros de Ánimas en el Día de los Santos Inocentes

A raíz de un vídeo publicado en internet, sobre la cuadrilla de ánimas de la localidad almeriense de Fondón, la memoria me ha hecho evocar lo que pudo ser una tradición perdida en Arjonilla, de la que tan solo quedan testimonios orales de personas ya fallecidas y escasos documentos que nos remiten a costumbres que el paso del tiempo hizo caer en el olvido.

En el día de los Santos Inocentes, una cuadrilla de campanilleros rondaba las calles de Arjonilla, costumbre documentada en el siglo XVIII, en la solicitud que el Hermano Mayor de la Cofradía de las Ánimas hacía al Cabildo municipal. Un dato interesante que aporta este documento es la utilización de los “trajes correspondientes”, y determinadas prácticas de regocijo particular que la mentalidad ilustrada se encargó de corregir. 


El documento dice así: ... En este Cavildo hize presente a esta Villa un memorial presentado por el hermano maior y Governadores de la Cofradía de las Venditas Ánimas del Purgatorio que se sirve en la Parroquial de esta Villa por el que solicitan licencia para pedir limosna el día de los Santos Inocentes con traxes correspondientes con el motivo de exitar la piedad y debozion christiana en alibio de dichas venditas almas. El que visto por sus merzedes dixeron concedieron las licencia que solicitan dichos cofrades con tal de que para pedir la dicha limosna no entren en las Iglesias ni se intrometan con los caballeros sazerdotes ni con mujeres aunque les ofrezcan limosnas para sacarlas de sus casas en cuerpo como antiguamente se hazía ni atropellen a persona alguna ni hagan con ella exceso contra su voluntad con aperzibimiento de que verificada qualesquiera de las cosas que lleban proibidas en el instante se recoxerá dicha lizenzia y zesará el venefizio que desean y sus merzedes apetezen y para que les conste debuelbaseles este memorial con testimonio de esta providenzia ...”[1]

lunes, 26 de diciembre de 2016

Sobre la primitiva imagen de Jesús Preso de la Cofradía de la Humildad

Imagen de Jesús preso (S.XVIII) y sayones. Se conocían
popularmente como "Judillas y Peletillas". Destruidos
durante la guerra civil.
Ildefonso Rueda Jándula

Para la mayoría de nuestras cofradías, la fecha exacta de su fundación supone una incógnita aún por desvelar.  El hallazgo de los primitivos Estatutos y Fundación de la Hermandad de Jesús de la Humildad de Arjonilla en 1732, en el Archivo Histórico Diocesano, nos ha permitido conocer el contexto histórico en el que se produce la fundación de nuestra Cofradía.

El hecho tuvo lugar en 1.732, una fecha muy próxima a la fundación de la confraternidad de soldados marianos del Santo Rosario, (los cargos). Ambas organizaciones, Hermandad de la Humildad y Cargos, mantuvieron esquemas de representación similares, de aspecto paramilitar, y surgen como reacción de un  grupo social concreto frente a la preponderancia de otro ya erigido. Es por lo que los Estatutos de la Hermandad de la Humildad, dejan claro que esta fundación estaría “Sujeta al Sr. Ordinario de este obispado y no a otra persona alguna, sin que la Hermandad de nuestra Señora de la Soledad que la sirven los Caballeros de esta Villa, tenga ni puedan tener sobre esta Cofradía acción alguna sino en el gobierno en las procesiones de Semana Santa.

Uno de los elementos que significarán esta sola sujeción al Obispo, serán los madroños del cíngulo propio de los nazarenos de la Hermandad. Por tanto, queda claro desde los primeros capítulos de los primitivos Estatutos, que la Cofradía de la Humildad surgió en “oposición” a un grupo social privilegiado, el de los Caballeros, que se unían en la Cofradía de la Soledad. En el fondo, encontramos un conflicto de clases, que en el siglo XVIII avanzan las Cofradías ante los cambios que conducirán al Nuevo Régimen.

sábado, 24 de diciembre de 2016

LA FUNDACIÓN DE LA HERMANDAD DE JESÚS DE LA HUMILDAD DE ARJONILLA SUS PRIMITIVOS ESTATUTOS

Imágenes titulares de la Cofradía: Jesús de la Humildad
y Ntra. Sra. del Mayor Dolor
Ildefonso Rueda Jándula

Para la mayoría de nuestras cofradías, la fecha exacta de su fundación supone una incógnita aún por desvelar, si bien, fondos documentales de la sala Cofradías del Archivo Histórico Diocesano, permiten sacar a la luz documentos de gran interés y que a buen seguro continuarán arrojando luz sobre la historia de nuestras cofradías. Es el caso de la fundación de la Hermandad de Jesús de la Humildad de Arjonilla, hecho que tuvo lugar en 1.732, una fecha muy próxima a la fundación de la confraternidad de soldados marianos del Santo Rosario, (los cargos). 

Ambas organizaciones, Hermandad de la Humildad y Cargos, mantuvieron esquemas de representación similares, de aspecto paramilitar, y surgen como reacción de un  grupo social concreto frente a la preponderancia de otro ya erigido. Es por lo que los Estatutos de la Hermandad de la Humildad, dejan claro que esta fundación estaría “Sujeta al Sr. Ordinario de este obispado y no a otra persona alguna, sin que la Hermandad de nuestra Señora de la Soledad que la sirven los Cavalleros de esta Villa, tenga ni puedan tener sobre esta Cofradía acción alguna sino en el gobierno en las procesiones de Semana Santa.” Uno de los elementos que significarán esta sola sujeción al Obispo, serán los madroños del cíngulo propio de los nazarenos de la Hermandad. El resto de los capítulos de los Estatutos, es como sigue.

sábado, 2 de abril de 2016

Danzas de espadas en las fiestas del barroco en Arjonilla

En algunos puntos de nuestra diversa Andalucía se conservan tradicionales danzas festivas "de espadas", asociadas a determinadas devociones religiosas. Estas danzas de espadas hay que relacionarlas con el folklore de los pueblos del Norte de España, que nos llegaron a nosotros gracias a los repobladores leoneses y castellanos. Poder documentar la existencia de estas danzas en la localidad e Arjonilla, nos permite continuar corroborando la teoría de Manuel Urbano Pérez Ortega, acerca de los orígenes de otras tradiciones locales como el Cañarrasca, en clara conexión con el folklore leonés. 

Se ha podido documentar en los gastos del cabildo municipal de Arjonilla, la celebración de una danza de espadas para la festividad del Corpus Christi del año 1.602, pagándose 36 reales a Francisco Parrado y consortes a tal efecto. Algunos años más tarde, en 1608, el cabildo pagó al vecino del lugar de Marmolejo Alonso Fernández, 24 reales en tres fanegas de cebada, por la danza de espadas que hizo en el Domingo de Resurrección. 

Estas danzas de espadas tienen su origen en los movimientos militares y con el tiempo se convirtieron en ceremonias de fiestas populares.